Como una forma de democratizar la reconexión con la naturaleza, se lleva a cabo la creación de este espacio virtual inmersivo de acceso libre a cargo de la UTEM y la Corporación Nacional Forestal (CONAF), que permite a las personas que no tengan las posibilidades de acercarse a un entorno natural, en este caso el Parque Nacional Río Clarillo, hacerlo mediante esta tecnología.

Se trata de un proyecto – el cual recoge la práctica de los baños de naturaleza, que consiste en encontrarse y conectar con la naturaleza- que surge del trabajo conjunto entre la carrera de Ingeniería en Gestión Turística; el Programa de Competitividad Turística, de la Facultad de Administración y Economía (FAE); y la Dirección de Tecnología Educativa y Aprendizaje para Toda la Vida (DTEAC), junto con la CONAF, con quienes existe un convenio desde 2019.

Sobre esta instancia, la rectora Marisol Durán Santis, indica que nuestra organización “pasó de ser una institución que tenía murallas a abrirse al territorio. No tenemos límites en esa materia y creemos que el tema de la vinculación con el medio es un componente que dejó de ser un adorno en los procesos de acreditación institucional o los procesos de trabajo y compromiso que hace cada académico, para ser el medio por el cual retroalimentamos nuestras prácticas docentes”.

Durante la instancia, que se realizó en Casa Central, también estuvieron presentes Renzo Galgani, gerente de Áreas Silvestres Protegidas de CONAF; Daniel Medel Quezada, presidente del Consejo Nacional de Guardaparques; Jorge Naranjo Navia, jefe del Departamento de Áreas Silvestres Protegidas de la Región Metropolitana; Diego Fuentealba Cid, director de Tecnología Educativa y Aprendizaje Continuo UTEM; además de autoridades, académicos y académicas, estudiantes y guardaparques.

Marfilda Sandoval Hormazábal, jefa de la carrera de Ingeniería en Gestión Turística, se refirió a cómo comenzó a gestarse la iniciativa poco antes de la pandemia, así como la intención de que sea un proyecto replicable. “Queremos que estos baños de naturaleza puedan escalar e investigarse, de ahí el interés nuestro, desde la academia. Porque si bien es cierto que hay un tema de contenido y tecnologías que se están aplicando, nosotros también queremos ir más allá, profundizar e investigar para llegar a determinar cuáles son las propiedades de los bosques en Chile, por ejemplo”, dice Marfilda.

En tanto, Ángel Lazo, encargado de Vinculación Social y Accesibilidad Universal de la Gerencia de Áreas Silvestres Protegidas de CONAF, indica que “el trabajo con la UTEM ha sido potente, fluido y bastante profesional. Tenemos expectativas para desarrollar esto, mediante un estudio para evaluar la calidad de los fitoncidas que propagan los árboles nativos en Chile, que son compuestos que estos desprenden y que cuando se respiran benefician la salud”,

El proyecto asocia la tecnología con algunas de las tendencias de estos últimos años, como la necesidad de reconexión y el turismo inclusivo. Es a través de ésta, que tiene una duración de entre 7 y 8 minutos, que es posible recorrer algunos sectores del parque nacional.

Sobre las principales conclusiones de este proyecto, Juan Carlos Cantillana Reyes, académico e investigador del Programa de Competitividad Turística, menciona que se ha virtualizado la experiencia, mediante la práctica inmersiva; se ha motivado a las personas a vivenciar esto tanto virtual como presencial; y se ha generado aprendizaje al servicio de la docencia.

“Esto es parte de lo que queremos y lo hemos hecho de forma paulatina en nuestras clases, en la asignatura de Recursos Turístico o Geografía turística, entre otras, que por ser transversal es válido, incorporando a futuro otras nuevas situaciones”, puntualiza el académico.

También agrega que existe la posibilidad de acercarse y revisar lo que es un baño de naturaleza a través de esta tecnología con un simple código QR. “Queremos motivar a las personas para que vayan al parque, y esta cápsula puede ser el primer paso para conocer y recorrer Río Clarillo”, añade.

Finalmente, Galgani, de CONAF, destacó que esta iniciativa es una muy buena noticia, y que los esfuerzos de todos permiten avanzar hacia caminos que se deben potenciar y construir. “Una experiencia que nos permitirá tener más ganas de conocer y cuidar estas áreas silvestres protegidas”, dice.