Durante este año fueron elaborados un total de 38 informes, los cuales fueron enviados Decanos, Jefes o Jefas de Carrera, Proyecto Ingeniería 2030, entre otros actores educativos. En estos documentos son descritos los desempeños de la nueva cohorte en las áreas de Matemática, Lenguaje y TIC del Perfil Mínimo Requerido (PMR). Adicionalmente, en esta ocasión fueron capturados datos respecto a Geometría, y el análisis de la información consideró una desagregación por sexo y tipo de ingreso a la universidad.

Algunas de las conclusiones alcanzadas a nivel institucional, dan cuenta que:

• Los y las estudiantes de la nueva cohorte presentan significativas brechas de
aprendizajes para las áreas de Matemática y Lenguaje, como también en el eje de Geometría, lo cual se contrasta con su alta valoración sobre el uso y manejo de las TIC. Ciertamente, estos resultados suponen deficiencias estructurales en los aprendizajes, las que podrían estar mediadas por vacíos conceptuales y procedimentales provenientes de la enseñanza escolar.

• Al analizar la variable sexo, en ninguna de las áreas o ejes analizados se identifican diferencias significativas respecto de los logros aprendizajes, por lo cual, es posible afirmar que las brechas de aprendizaje son transversales a los estudiantes, indistintamente de su sexo.

• Cuando son analizados los resultados de la cohorte 2020 y 2021, se advierte que ambas generaciones dan cuenta de brechas aprendizajes significativas que limitan su proximidad al PMR. Lo anterior, se evidencia en el porcentaje de estudiantes que se concentran en los niveles básico e insuficiente. De este modo, para ambos años, en estos niveles se concentra más de dos tercios de los estudiantes de la generación, indistintamente de la competencia analizada. Por su parte, en el caso de Lenguaje la situación es un poco diferente, pues los estudiantes de la generación 2021 evidencian brechas menos significativas.

La Vicerrectora Académica señaló que estos resultados académicos “son muy relevantes para la institución, pues unidos a los datos de carácter sicosocial recogidos a través del Cuestionario de Factores de Retención (CFR), nos permiten conocer a cabalidad el Perfil Real de Ingreso de los y las nuevas estudiantes”. La autoridad agregó que el desafío es lograr generar un seguimiento efectivo de los y las estudiantes, pudiendo identificar e intervenir con apoyos académicos y psicosociales cuando sea necesario. Además, esta información requerirá ser acogida por las y las docentes de la universidad, de modo que puedan utilizarlo en el proceso de enseñanza-aprendizaje.

La socialización de los resultados de los informes se realizará a inicios de junio, período en que el DESPE se reunirá con las diferentes unidades académicas para analizar los resultados particulares por carrera o facultad.